"Cuando escuché hablar de que había muertos en los armarios, me ofrecí voluntaria para sacarlos", cuenta la demandante. "En Rumanía, cuando se fue Ceauşescu, hicimos limpieza y tengo experiencia. Algunos cadáveres estaban irreconocibles, pero los tiramos al Dâmboviţa para que no olieran mal. Aquí tienen el Ebro, ¿no?"
Al parecer, tras esa primera limpieza la Sra. Gia comenzó a mostrar malas costumbre, interfiriendo en el trabajo de los demás. "Entraba en los despacho diciendo que quería levantar las alfombras, abogaba por la transparencia en los cristales y recomendaba airear los trapos sucios. Decía que olía a cerrado, que teníamos que abrir las puertas para que entrara aire nuevo. Iba provocando". Incluso, indican en voz baja, quería limpiar en el despacho del alcalde.
Críticas de la oposición
Las revelaciones de L. Gia, a la que ya llaman en algunos círculos como la Snowden aragonesa por airear trapos sucios, han sido muy comentados. Un miembro de la oposición, que prefiere permanecer en el anonimato de su despacho, comentaba que "habrá que pedir responsabilidad por el cierre del Ebrobus, que claramente dejó de navegar porque encallaba en los cadáveres". También desde la Confederación Hidrográfica están elaborando informes pare dragar los fondos en profundidad "antes de que los cadáveres salgan a flote".
Desde la empresa Gabinete de Limpieza No Asociado A Ningún Partido Político de Derechas Guiño Guiño S.A. se ha denunciado que el problema es que Trapos Sucios S.L. está claramente relacionada con personas cercanas al partido político que gobierna en el consistorio, de izquierdas, y eso ha provocado que el malestar de cargos públicos haya tenido consecuencias laborables. "En una empresa de limpieza de derechas nunca habríamos llegado a estos extremos de contratar extranjeros con todos los ni-nis que hay en el INEM", declara Belen Chufada, portavoz del Gabinete.
Por su parte, L. Gia ha anunciado que seguirá con su denuncia. "Aquí lo que molesta es la proactividad. Muchos trabajadores temen que se aireen sus miserias. No comprenden que los trapos sucios se limpian en casa y yo soy una profesional."
Desde la empresa Gabinete de Limpieza No Asociado A Ningún Partido Político de Derechas Guiño Guiño S.A. se ha denunciado que el problema es que Trapos Sucios S.L. está claramente relacionada con personas cercanas al partido político que gobierna en el consistorio, de izquierdas, y eso ha provocado que el malestar de cargos públicos haya tenido consecuencias laborables. "En una empresa de limpieza de derechas nunca habríamos llegado a estos extremos de contratar extranjeros con todos los ni-nis que hay en el INEM", declara Belen Chufada, portavoz del Gabinete.
Por su parte, L. Gia ha anunciado que seguirá con su denuncia. "Aquí lo que molesta es la proactividad. Muchos trabajadores temen que se aireen sus miserias. No comprenden que los trapos sucios se limpian en casa y yo soy una profesional."
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